Texto y fotos por Luisa Jurado.
Los habitantes del barrio La Enea manifiestan que los delincuentes vienen de otros lugares en horas de la madrugada y hurtan las tapas de los alcantarillados para después venderlas como chatarra, afectando la movilidad y tránsito por los andenes y calles.
Los denunciantes indican que el proceso de reemplazo y montaje de las tapas, por parte de la empresa Aguas de Manizales, es demorado. Por ello optan por taparlas con tablas, piedras y escombros, con el fin de evitar accidentes hasta que llegue el cambio.
Cindy Alarcón, oficial del Comando de Policía del barrio, indica que ante la situación, se están realizando procesos de vigilancia nocturna para evitar estos hechos.
Una medida que parece no ser suficiente pues Sheir Sahada, habitante de La Enea, indica que mientras no se prohiba la compra de estas tapas metálicas en las chatarrerías, los robos seguirán. Agrega que frente a su sastrería se han robado la misma tapa en varias oportunidades y el proceso de denuncia es largo.
Por su parte, la empresa Agua de Manizales tiene una campaña dirigida a estas situaciones llamada “Destapemos el Robo’’. La comunidad se puede comunicar a la línea 116 para identificar el sitio donde se presentó el robo y de esta manera indicar el tiempo aproximado de arreglo.