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Para los estudiantes de la Escuela de Comunicación U. Manizales que están a mitad del semestre, el paso del tiempo se vive como una montaña rusa llena de emociones. Entre los proyectos acumulados, los parciales, las entregas y las largas noches en vela, los días parecen una mezcla de tensión y expectativa.
El tiempo avanza firme e impecable, marcando un ritmo en cada segundo que se escapa. Las manecillas del reloj giran sin descanso. Cada tic es una oportunidad perdida y a la vez, una ventana abierta. Cada tac recuerda que el presente es fugaz y que la vida sigue su curso sin detenerse.
Álvaro Martínez, estudiante de tercer semestre, menciona que las semanas avanzan rápido y que en un parpadeo las clases que parecían eternas ya están a punto de terminar.
Además, agrega: “A mitad del semestre lo que más me motiva es el deseo constante de evolucionar y marcar la diferencia. El amor que siento por esta disciplina me motiva a seguir y alcanzar mis metas profesionales”.
Por otro lado, Alejandra Sarache, de noveno semestre, resalta la creciente demanda de comunicadores en el mercado laboral actual.
Según ella, la importancia de una comunicación efectiva en las organizaciones es cada vez más importante y su experiencia en la práctica confirmó que la formación universitaria es clave para lograr alcanzar el éxito profesional.
En definitiva, el tiempo que transcurre en la universidad es un reflejo del aprendizaje constante y de los retos que surgen y enfrentan los estudiantes a medida que su formación avanza.
Sin embargo, el deseo y la superación son los motores que impulsan a continuar la carrera. Cada segundo que pasa no solo significa el fin de una etapa, sino también el inicio de su futuro profesional.
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Publicado: 26 de septiembre del 2024
Redacción: Juana del Pilar Rivera Buendía, prepracticante del Consultorio de Comunicación Corporativa (C3) U. Manizales. Jdrivera92568@umanizales.edu.co
