Con esperanza, acompañamiento y segundas oportunidades
Fundación es la palabra que mejor define el motor de vida de John James Ceballos, un hombre que renació después de 22 años en las calles y en la adicción. Su historia no se esconde, se cuenta con orgullo porque hoy lleva 14 años sin consumir sustancias psicoactivas, tiempo en el que ha construido, desde el dolor superado, una nueva forma de tenderle la mano a quienes aún luchan. Desde que dejó las calles, se propuso crear espacios seguros donde otras personas pudieran soñar con una vida distinta, y así nació la Fundación Tribu Efecto Mariposa.
Fundación Tribu Efecto Mariposa se levanta sobre los pilares del acompañamiento, la empatía y la transformación. Allí, hombres y mujeres que viven en condición de calle o que buscan superar el consumo encuentran una red real de apoyo, no solo desde lo asistencial, sino también desde lo humano. El enfoque de esta fundación va más allá de lo terapéutico: se trata de reconstruir vínculos rotos, recuperar la confianza y dar herramientas para que las personas puedan reescribir sus historias.
Fundación también es sinónimo de comunidad. Hoy, junto con una segunda organización hermana, trabajan por sostener procesos de recuperación con dignidad, amor y respeto. John James camina cada día con quienes inician su proceso de cambio, demostrando que sí es posible salir del fondo y convertirse en un faro para otros. Su sueño sigue creciendo, porque para él, cada vida rescatada reafirma que no se necesita tenerlo todo para empezar, sino la decisión firme de no volver atrás. Fundación Tribu Efecto Mariposa representa eso: la fuerza imparable de una pequeña acción que puede cambiar el rumbo de una vida entera.
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