El debate por el presupuesto 2026 encendió las alarmas entre varios congresistas de Caldas. Los representantes advirtieron sobre la centralización de recursos y las posibles consecuencias que podrían tener los recortes proyectados por el Gobierno Nacional, en caso de no aprobarse la ley de financiamiento.
Preocupación por la distribución de recursos
Para el representante a la Cámara por el Partido Liberal, Octavio Cardona, la propuesta actual deja en evidencia una concentración del poder fiscal en el Gobierno.
“Lo que hizo el gobierno fue centralizar el manejo de recursos. A Caldas le asignan un billón 55 mil millones, pero en la ejecución real solo hay dos o tres vías y algo en educación. El resto es para funcionamiento”, explicó.
Cardona también criticó que no haya recursos para Aerocafé y cuestionó que gran parte de las partidas no estén destinadas a inversión regional.
“A Caldas no le va ni cinco de bien en el presupuesto. Me llamó la atención que no había nada para Aerocafé”, agregó.
El congresista advirtió que el panorama podría empeorar cuando llegue la ley de competencias. “Al gobierno solo le queda una opción y es hacer un recorte presupuestal en las asignaciones y las más damnificadas van a ser las regiones”, afirmó. Además, aseguró que ningún congresista quedó conforme con el resultado final.
Dudas sobre la financiación y recortes
Por su parte, Juan Sebastián Gómez, representante a la Cámara por el Nuevo Liberalismo, advirtió sobre la falta de certeza financiera.
“El presupuesto aprobado es de alrededor de 550 billones, de los cuales 16 billones dependen de la ley de financiamiento. Si no se aprueba, ¿con qué se financiarán todos esos aspectos?”, cuestionó.
Gómez señaló que la reducción de la ley de financiamiento de 26 a 16 billones implicó recortes importantes. “Le bajaron a la inversión en algunos temas. Además, cuando el gobierno hace recortes no es en el costo del Estado, que cada vez es más caro”, indicó.
También criticó la reducción de 695 mil millones de pesos a la rama judicial, calificándola como una decisión contradictoria frente al discurso de paz total. “No me parece coherente recortar presupuesto en justicia y en el aspecto social”, concluyó.
Ambos congresistas coincidieron en que el presupuesto 2026 no responde a las necesidades de las regiones y que su ejecución dependerá en gran medida de lo que ocurra con la ley de financiamiento en el Congreso de la República.

