Por Juan Esteban Valencia Castaño, Laura Medina Ovalle y Yicel Guerrero Córdoba.
La Dirección Territorial de Salud de Caldas y la Alcaldía de Chinchiná intensifican las estrategias de detección y tratamiento para la tuberculosis (TB) en el municipio, con el objetivo de reducir el número de casos en comparación con el año pasado.
Diana Marcela Roldán, profesional en vigilancia de salud pública, afirma que el plan de acción consiste en realizar búsquedas activas en centros de atención a adultos mayores, la plaza de mercado y las residencias aledañas. Además, identificar posibles infectados mediante la detección de síntomas respiratorios. Para ello también realizan operativos conjuntos con la Policía y la Alcaldía, en los que abordan a habitantes de calle y recolectan muestras para confirmar la presencia del bacilo tuberculoso y garantizar un tratamiento.
En este sentido, según la líder en salud pública del Hospital San Marcos, Verónica Ocampo, en lo que va de 2025, hay 14 pacientes activos y que están en su tratamiento. También menciona qué grupo de pacientes tienen hasta la fecha. “Los usuarios que nos llegan son personas con muchas condiciones de vulnerabilidad; muchos recolectores de café que viven en condiciones de hacinamiento o en la calle, lo que hace que tengan muchos factores de riesgo”.
Una lucha constante
La tuberculosis es un hecho presente en Chinchiná desde hace varios años. De acuerdo con el Sistema Nacional de Vigilancia en Salud Pública (SIVIGILA), el municipio reportó 36 casos en 2024, 42 en 2023 y 37 casos en el 2022.
En cuanto a las estrategias de años anteriores, Sebastián Hernández, del grupo de Resistencia Antibiótica, expresa que son diferentes según el gobierno del momento y que hasta finales de 2022 las acciones diferenciales estaban sujetas a la gestión hospitalaria y al compromiso de los funcionarios de salud pública. “Algunos funcionarios, por ejemplo, eran muy juiciosos y buscaban la forma de conseguirles desayuno a los habitantes de calle para que ellos asistieran y se tomaran los medicamentos juiciosos. Estaban pendientes de ellos”.
Así pues, Claudia Zapata, auxiliar de enfermería, y encargada del manejo de medicamentos para la tuberculosis en el Hospital San Marcos de Chinchiná, expone el procedimiento habitual con las personas diagnosticadas con TB. “Los pacientes son diagnosticados, se les hace la ficha epidemiológica. El médico le hace la fórmula que es la primera fase y, según el peso, se les formula el medicamento y se reporta a la territorial”.
¿Cómo se actúa en el resto del país?
El Instituto Nacional de Salud, elaboró el plan estratégico Colombia Hacia el Fin de la Tuberculosis 2016-2025. Allí establecieron estrategias para reducir la incidencia de esta enfermedad en el país y entre sus principales acciones destacan el fortalecimiento de la vigilancia epidemiológica, la articulación con el Modelo Integral de Atención en Salud (MIAS) y el enfoque en la detección temprana y tratamiento oportuno, especialmente en poblaciones vulnerables.
Por otra parte, Jorge Rubio, director de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, indica la necesidad de fortalecer estas medidas en Chinchiná y todo Caldas. “Aunque Colombia no está entre los países con mayor carga de TB, la enfermedad sigue siendo un problema significativo de salud pública. Identificar y tratar más casos ayuda a controlar su propagación y reducir el número de personas infectadas que pueden transmitir la enfermedad, especialmente en comunidades vulnerables”.
Chinchiná refuerza acciones contra la tuberculosis
La disminución de casos de tuberculosis en Chinchiná se debe a un esfuerzo conjunto en la detección temprana, tratamientos gratuitos y la labor de la Alcaldía. La población debe conocer los síntomas: tos persistente, fiebre, pérdida de peso, entre otros.

